Homero Martínez Ocasio está ocupado filosofando en la ducha,
escribiendo poemas con queso derretido
y negociando con su impresora (otra vez).
Pronto habrá libros, charlas y reflexiones innecesarias.
Mientras tanto, no llames a tu ex, adopta un perro
y repite: “esto tiene sentido… probablemente”.
Gracias por la paciencia, o por el morbo.
Nos vemos pronto, o en un sueño raro.